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¿Seríamos capaces de vivir viajando? Es la pregunta que nos hicimos al pensar en la posibilidad de abandonar toda nuestra vida tradicional de trabajo y estilo de vida citadino.


Está historia de viaje empezó con la celebración del amor mismo, pues para finales del año 2015 Guto (Carlos Molano) y yo (Mónica Quiroz) cómo buenos amigos nos aventuramos a viajar de Bogotá al Cocuy y subir al nevado del púlpito del diablo, viajando en una moto AKT TTX 180 súper motar que a la final terminamos adaptando con llantas de taco para visitar esos lugares de difícil acceso. Tanta fue la experiencia adquirida de buenos momentos cómo malos, que para enero de 2016 emprendimos viaje en la misma moto a la guajira, cada vez aventurándonos a ir más lejos, a enamorarnos de la ruta, a recorrer kilómetros y conocer lugares majestuosos. Nos íbamos conociendo como personas, como amigos y como pareja, pues en el viaje es donde conoces a tu compañero de ruta de la manera más transparente, ya que se viven todo tipo de experiencias, te pones a prueba y evalúas los niveles de tolerancia y en definitiva sabes si puedes hacer equipo o no.

Es así como cada momento que podíamos nos escapábamos de nuestros trabajos y recorríamos muchas partes de Colombia, hasta fuimos a caño cristales por las trochas de la Macarena en moto desde Bogotá.

Quisimos mejorar y cambiamos a una moto Honda XRE300 con la que recorrimos casi todo nuestro país hermano Ecuador y por supuesto muchos lugares más de Colombia, el cambio fue positivo, pues era una moto muy cómoda para los dos y nos llevaba a lugares espectaculares, es así como el bichito del viaje empezó a ser cada vez más grande, pues empezó a surgir un sin sabor a la hora de tener que retornar a nuestros trabajos abituales, a cumplir un horario, a adaptarse de nuevo a ese agite de la ciudad, el caos y la monotonía (cabe aclarar que nuestra vida y trabajos eran muy buenos solo que queríamos salir de esa zona de confort). Y como de la tempestad llega la calma, llegó el proyecto que hoy en día celebramos llamado “La Ruta Mi Destino” queríamos hacer el viaje por todo Suramérica en moto, pues conocimos a muchos viajeros que ya lo habían hecho y las experiencias que contaban eran magicas.

Así que prendimos motores al trabajo duro, a la planeación y ejecución de una vida de viaje, cada vez más iba cogiendo forma ese proyecto, pues a finales del 2018 llegó la integrante chiqui (nuestra perra viajera) a la familia y nos hizo pensar en el viaje, ya no en moto, si no un carro, un carro que nos llevará a los tres, que fuera 4×4, de cilindraje pequeño, que fuera poderoso y económico para su compra.

Es así como llegó “Errante” un LADA Niva modelo 2005 de cilindraje 1.700 y con todo el potencial para un proyecto de esta magnitud, poco a poco lo fuimos probando en terreno, viajamos de nuevo a la Macarena a caño canoas, fuimos hasta punta gallinas en la guajira y hasta Puerto nariño por el vichada, TODAS, rutas exigentes que nos permitieron ver el potencial de este camperito y ahí fue donde reafirmamos y dimos ruedo al plan, para el año 2019, empezamos a equiparnos poco a poco, pues nuestros sueldos no daban para poder arrancar en menor tiempo, compramos la carpa de techo, una nevera, una estufa, todo un equipo de camping, sillas, baño vestier, hasta lavadora, hicimos adecuaciones al carro como defensas rígidas, compramos un wincher, le hicimos un soporte para poder llevar las bicis (nos encanta el ciclomontañismo) hicimos un tanque de agua, compramos otra batería para los accesorios y cosas necesarias de la casa, quitamos las sillas traseras e hicimos un mueble adentro para tener orden en la casa, en fin, cada cosa y detalle era pensado para hacer realidad el tan anhelado sueño. Sumado a esto quisimos documentar el viaje, entonces compramos una que otra cosa necesaria para temas de edición.

Todo parecía estar listo, sin embargo, las noticias del COVID para el año 2020 no ayudaban a pensar en el cruce de fronteras y arrancar según lo pensado para el 2021…

Dejamos que mejorará el tema y no permitimos que nuestro sueño se frustrara por los comentarios y un sin fin de cosas que decían al respecto, así que por fin para marzo del 2022 ya sentimos que estábamos más que listos y tomamos la decisión más difícil de renunciar a nuestros trabajos cómodos y seguros para aventurarnos a una vida nómada, llena de emociones, algunas incomodidades y conocimientos únicos.

Salimos a ruta el 13 de abril de 2022 y apenas llevamos algo más de un mes viajando, con algunos datos curiosos como que no hemos pagado ni un solo peaje en estos casi 2.300 KMS que hemos recorrido por Colombia, pues nuestras rutas son más veredales y terciarias, en definitiva son lugares más bellos y sagrados.

Documentaremos todo el viaje por canal de Youtube, redes sociales y escribiremos sobre todas las historias que nos encontremos para dejar una huella de esta historia de “La Ruta Mi Destino”.

Gracias por leernos y esperamos que nos acompañes en mas historias.

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